Así es como podría funcionar el gran secreto de McLaren
Descubre cómo McLaren utiliza una revolucionaria tecnología para gestionar la temperatura de sus neumáticos, logrando así una enorme ventaja.

La gestión térmica de los neumáticos es una de las claves principales para el rendimiento en Fórmula 1, y ningún equipo domina este aspecto tan crucial como McLaren. El secreto del equipo británico podría residir en una innovadora tecnología pasiva que utiliza materiales de cambio de fase en los tambores de freno, garantizando un control excepcional de la temperatura de sus ruedas.
El arte de gestionar las temperaturas
La temperatura óptima de los neumáticos determina directamente el rendimiento en pista. Demasiado frío y no existe agarre suficiente; demasiado calor y la goma se degrada con rapidez, provocando pérdida de rendimiento. Todos los equipos intentan calentar rápidamente los neumáticos para clasificar bien y tener adherencia desde la primera vuelta, pero sin sobrecalentarlos posteriormente en carrera.
Es aquí donde McLaren marca la diferencia. Aunque equipos como Red Bull o Mercedes logran calentar sus neumáticos tan rápido como McLaren, estos últimos sobresalen porque después no sufren sobrecalentamientos. Esto se nota especialmente en sectores finales de clasificación, donde McLaren mantiene el agarre mientras otros pierden ritmo por exceso de temperatura en sus neumáticos traseros.
¿Cómo logra McLaren esta ventaja técnica?
La clave parece estar en la gestión del calor que generan los frenos dentro de las ruedas. Normalmente, los equipos usan el calor de los discos de freno para calentar la llanta y, por ende, los neumáticos. Pero el verdadero desafío es controlar y reducir ese aporte térmico una vez alcanzada la temperatura ideal.
Según la investigación revelada en YouTube por un ingeniero especializado en tecnologías térmicas en motorsport, el secreto de McLaren radicaría en un ingenioso sistema dentro de los tambores de freno, capaz de cambiar automáticamente su comportamiento térmico durante la carrera.
Este mecanismo implicaría, por ejemplo, válvulas térmicas pasivas o materiales inteligentes sensibles a la temperatura, que inicialmente permiten que el calor del freno caliente el neumático, pero que posteriormente actúan como sistemas de refrigeración, invirtiendo el flujo de aire. Una hipótesis inicial sugería el uso de tiras bimetálicas capaces de cambiar la dirección del flujo según la temperatura alcanzada.
La innovación real: materiales con cambio de fase
Sin embargo, la solución más probable y revolucionaria, mencionada específicamente por el experto, implica el uso de materiales con cambio de fase (PCM). Estos materiales absorben o liberan grandes cantidades de calor cuando cambian de estado físico (por ejemplo, de sólido a líquido) manteniendo constante su temperatura durante este proceso.
Antes de que los neumáticos lleguen a la temperatura adecuada:

Después de que los neumáticos sobrepasen la temperatura adecuada:

Esto permitiría a McLaren tener un sistema de regulación térmica completamente pasivo y oculto dentro de los tambores, absorbiendo el exceso de calor de los frenos cuando es necesario. Los rivales carecerían de esta capacidad y, por tanto, sus neumáticos se sobrecalientan inevitablemente.
Legalidad y sospechas en el paddock
La posibilidad de que McLaren utilizase agua o líquidos en el sistema fue sugerida por Red Bull, quienes incluso afirmaron tener pruebas. McLaren invitó a Red Bull a presentar oficialmente dicha evidencia ante la FIA, algo que el equipo austríaco finalmente no hizo, sugiriendo que sus supuestas pruebas quizá no eran tan sólidas.
En Miami, el equipo Red Bull incorporó cámaras térmicas en su monoplaza para que, cuando Max siguiese de cerca a algún McLaren, pudiesen averiguar un poco mejor que ocurre en el interior del neumático y del tambor
La clave de la legalidad reside en que la normativa actual de la FIA regula únicamente la forma exterior de los tambores de freno, dejando libertad total a los equipos sobre la estructura interna y los materiales empleados. Esto convierte en totalmente legal la solución que McLaren estaría implementando, siempre que no utilice fluidos adicionales que estén explícitamente prohibidos.
Evidencias indirectas y secretismo en boxes
Otra señal que aumenta las sospechas es el comportamiento del equipo en boxes. McLaren no oculta especialmente sus tambores de freno desmontados (que parecen idénticos a los del resto), pero curiosamente levanta muros de mecánicos para impedir que otros equipos observen cómo ensamblan estas piezas en la rueda.
Las cámaras térmicas de Red Bull mostraron, además, que los tambores de freno de McLaren están significativamente más fríos durante las carreras comparados con los demás equipos, presentando patrones térmicos muy diferentes.
McLaren no confirma, pero las piezas encajan
Desde Woking mantienen silencio sobre los detalles concretos, limitándose a afirmar que simplemente poseen un sistema de refrigeración eficiente y bien diseñado. Zack Brown, CEO de McLaren, incluso se permitió bromear colocando en la botella de agua la etiqueta “Tire Water” (agua para neumáticos), alimentando aún más las especulaciones del paddock.
Sin embargo, los indicios apuntan fuertemente hacia el uso de estos innovadores materiales con cambio de fase, tecnología de la que McLaren ya tiene experiencia directa. Curiosamente, el propio autor del vídeo reveló haber realizado anteriormente su tesis en Woking precisamente sobre materiales de cambio de fase aplicados a la refrigeración de baterías en competición.
Nadie les debería poder igualar
La introducción de esta tecnología explicaría claramente la actual ventaja competitiva de McLaren en la gestión térmica de neumáticos, un factor que puede ser decisivo durante toda la temporada, Todos los equipos trabajan ya a contrarreloj en la normativa 2026, por lo que se antoja complicado que algún equipo se pueda permitir invertir tanto en igualar esta tecnología. Aunque Ferrari, por ejemplo, ya ha manifestado que llevarán piezas más allá del parón de verano. Pero mientras tanto, la escudería británica sigue teniendo en sus manos una ventaja decisiva y completamente legal.