Cómo influirá el polémico neumático C6 de Pirelli en Mónaco y más allá
Descubre cómo el polémico neumático C6 de Pirelli influirá en las estrategias de Mónaco y cómo podría cambiar la selección de compuestos en futuras carreras de F1

La Fórmula 1 se enfrenta a una situación particular con los neumáticos tras el debut en Imola del nuevo compuesto C6 de Pirelli. Diseñado originalmente para circuitos urbanos, como el trazado de Montecarlo, este compuesto se mostró algo inconsistente en el pasado Gran Premio de Emilia-Romaña. Esto ha generado dudas sobre cómo se comportará en circuitos tan específicos como el del Principado, y también ha hecho que Pirelli considere la posibilidad de ‘saltarse’ niveles entre compuestos para las próximas carreras del calendario.
La historia detrás del neumático C6
En febrero, la FIA aprobó una norma especial para el Gran Premio de Mónaco: todos los equipos deberán usar obligatoriamente los tres compuestos disponibles en carrera. Esto garantiza, como mínimo, una estrategia de dos paradas en boxes. Según Mario Isola, jefe de competición de Pirelli, esto busca generar carreras más emocionantes y evitar la tendencia actual hacia estrategias demasiado conservadoras:
“Queremos empujarlos hacia estrategias de dos paradas porque hay más acción, más imprevisibilidad y mejores carreras. Pero con tres compuestos tan cercanos entre sí, siempre tienden a usar el duro y el medio para ir a una parada”.
Para ello, Pirelli introdujo el nuevo C6, un compuesto ultrablando aún más extremo que el anterior, pensado inicialmente solo para circuitos urbanos como Mónaco y Las Vegas. Sin embargo, ahora consideran utilizarlo en más carreras, como Canadá, Bakú, Singapur y México, tras haber debutado en Imola como prueba experimental.
¿Por qué Imola antes de Mónaco?
La elección de Imola fue una decisión estratégica de Pirelli para evaluar el rendimiento del nuevo neumático en un circuito que somete a los compuestos a mayores cargas laterales y térmicas. Simone Berra, ingeniero jefe de Pirelli, explicó claramente el motivo:
“Recoger información sobre el C6 en Mónaco no era realmente significativo. Mónaco es un circuito especial: puede haber graining solo por el asfalto liso, las curvas lentas y ese tipo de factores. Para nosotros era muy importante recoger datos aquí [en Imola] sobre el C6, también de cara a las selecciones para la segunda mitad de la temporada”.
Sin embargo, Imola expuso rápidamente las limitaciones del C6: un pico de rendimiento muy breve, tras el cual la temperatura y las deformaciones hacen que el neumático salga de su ventana óptima, dificultando incluso completar una sola vuelta rápida. Este fenómeno provocó que muchos equipos optasen por clasificar con el neumático medio, alterando por completo las previsiones.
Ferrari y Red Bull ven afectado el rendimiento de McLaren
La irregularidad del C6 afectó especialmente a McLaren en Imola, algo que no pasó desapercibido para sus principales rivales. Desde Red Bull, Christian Horner destacó tras la carrera que estaba sorprendido por la inesperada caída en el rendimiento del equipo británico. Por su parte, Ferrari también vio cómo las peculiaridades del C6 afectaban la lucha directa con sus rivales inmediatos, generando dudas sobre qué sucederá en Mónaco, un circuito mucho más lento, pero también más exigente a nivel de grip mecánico.
A pesar de que Andrea Stella, director del equipo McLaren, restó importancia a las críticas asegurando que sus rivales se estaban centrando en aspectos equivocados, lo cierto es que la polémica en torno al nuevo compuesto sigue vigente.
¿”Saltarse” neumáticos para aumentar diferencias estratégicas?
La similitud en rendimiento entre los compuestos actuales es otro problema que busca resolver Pirelli. Mario Isola admitió abiertamente que estudian utilizar combinaciones más radicales, evitando la secuencia habitual entre compuestos consecutivos:
“Tenemos que entender si con este sistema animamos a algunos a elegir una combinación blanda-media para la carrera —lo que implica dos paradas—, y si prefieren una sola parada con media-dura, su ritmo será más bajo que el de los otros”.
Por ello, Berra agregó que ya están considerando combinaciones poco habituales para futuros Grandes Premios:
“Para Singapur estamos considerando llevar el C6, y también empezar a saltar compuestos. Así que, por ejemplo, llevar C2, C4 y C6 a algunos circuitos para probar algo distinto, o C3, C4 y C6, para diferenciar enfoques estratégicos”.
Esta sería una manera de incentivar carreras más dinámicas, con decisiones más agresivas y variables, en lugar de la monotonía estratégica que ha dominado últimamente.
Lecciones del pasado: evitar otro “hiperblando”
En 2018, Pirelli introdujo un neumático “hiperblando” en Mónaco, lo que resultó en una carrera extremadamente conservadora debido al temor de los equipos a desgastarlo prematuramente. El objetivo este año es evitar repetir aquella experiencia con el C6 y asegurar carreras en las que los equipos se vean obligados a gestionar más eficazmente los neumáticos y arriesgarse estratégicamente.
Mónaco será la verdadera prueba para evaluar si la apuesta estratégica de Pirelli por el C6 tiene sentido en circuitos urbanos y si es capaz de ofrecer la variedad estratégica que tanto se reclama. Su impacto podría redefinir la estrategia de neumáticos en la Fórmula 1 para el resto de la temporada.